jueves, 16 de abril de 2009

Postales de invierno


Prólogo, por Rodrigo Fresán

Apuntes para una teoría del frío


"UNO El frío ahí afuera, el frío que asciende cuando desciende el calor del amor, el frío que corre por los pasillos del cuerpo que unen o desunen al corazón con el cerebro (o viceversa), el frío que hace danzar al mercurio rojo sangre la danza del termómetro, el frío que se siente en los huesos cuando comienzan a cerrarse las puertas de la juventud, el frío que no se puede aislar con abrigos o calefactores, el frío que es todavía más frío cuando pensamos en qué frío hace, el frío del pasado que es también frío del futuro y los fríos que no podemos dejar de pensar y sentir junto a este frío del presente.


De todos estos fríos que en realidad son un sólo frío trata Postales de invierno, primera y perfecta novela de la norteamericana Ann Beattie publicada originalmente en 1976 y ahora, por fin, temblando en nuestro idioma, como si no hubieran pasado los años ni las nevadas".


Así comienza el prólogo de Postales de invierno. Amor no correspondido, pérdida de la juventud. Mucho frío. Me ha dejado por los suelos. Es ese tipo de libros que retratan tan bien la realidad que llegan a deprimir. En un primer momento piensas: "vaya vida más aburrida la de Charles y Sam", pero luego conforme te vas metiendo en la novela, te das cuenta que simplemente es una vida normal. Real. No es una vida de cuento. Es como la mía, en cierto modo. Entonces es cuando te deprimes todavía más. ¿Hasta qué punto puede gustarte un libro que te ha hecho estar triste? Sigo dándole vueltas...

4 comentarios:

desconvencida dijo...

Me encanta esta colección de Libros del Asteroide, son una preciosidad...

En cuanto a tu pregunta, yo creo que no es incompatibles, también hay películas inmensamente tristes que te pueden llegar a gustar, eso sí,es imprescindible encontrarse de buen ánimo para enfrentarse a determinados libros o películas...

Helene Hanff dijo...

¡¡A mí también me encanta esta colección, Desconvencida!!

No sé por qué pero no me asalta esta duda con las películas tristes. Pueden ser muy tristes y encantarme. Este libro, buf! no sé. Creo que la vuelta repentina del invierno ha influido en mi estado de ánimo y por eso me ha llegado más...¡en fin! ¡un beso Desconvencida!

Voy a elegir ahora algo divertido para leer!!

Jorge dijo...

¡Una puñetera obra maestra! Una novela real, sin argumento definido... como es la vida de cada uno de nosotros. La forma de dialogar de la autora... como construye conversaciones "reales", con reacciones "reales". Y todos conocemos gente como Sam o Charles. Me encantó y me dedico a recomendarla allá por donde voy, ya sea la en la librería, en la jungla birmana o en el imperio de los Morlocks.

Y hola, que no he saludado como debiera.

Helene Hanff dijo...

¡Hola Jorge! Es tan real que llega a asustar!!