lunes, 1 de noviembre de 2010

Domingo



Recuerdo los domingos de mi infancia como días en los que no ocurría nada. Un mero día de paso, una cuenta atrás para llegar al lunes, y a las obligaciones y a los madrugones. Los domingos no existían porque no tenían entidad propia. De mi dormitorio, al salón. A la cocina donde mi madre preparaba la comida para la semana. De los deberes al salón donde mi padre leía o veía el resumen de la jornada de fútbol. Todo estaba cerrado, las calles estaban desiertas. Nada que hacer.

Con los años he empezado a disfrutar de este día. Levantarme tarde, leer el periódico, comer fuera de casa, ir al cine. Me encanta disfrutar del descanso de este día, en el que parece que el tiempo pasa más lentamente. Pero, al llegar la tarde, vuelve esa sensación de entonces, de cuenta atrás. De planificación de una serie de obligaciones que no quiero que lleguen, pero que inevitablemente van a llegar.

Este cuadro de Hopper, que forma parte de la exposición Made in USA Arte americano de la Phillips Collection y que se puede ver en Fundación Mapfre, me devuelve a aquella época en la que los domingos me hacían estar intranquila. La ciudad está cerrada, aunque sea de día. Y ese señor allí sentado en la acera me desconcierta. Es como un fantasma. Tiene los brazos cruzados y fuma un puro, con la mirada perdida. Los personajes de los cuadros de Edwar Hopper son así: almas solitarias en escenarios inhóspitos que representan decadencia. Lugares que fueron algo y que se han quedado en nada. Una calle siempre transitada, pero completamente vacía en domingo. Una habitación de hotel donde se vivieron momentos felices, pero que ahora sólo transmite vacío y soledad. Un vagón de tren en el que una mujer mira el paisaje, con la mirada perdida, pensado en todo lo que está dejando atrás.

Creo que debo reconciliarme con los domingos.

6 comentarios:

TATO dijo...

El tiempo, simplemente, se difumina. Espacio para hacer o no hacer. Tiempo para aburrirnos sin que nos moleste. Es algo genial.

memento dijo...

Me ha gustado mucho este post (por cierto, me ha salido como palabra de verificación "tralará" :-)

Helene Hanff dijo...

Jajaja, me encanta lo de tralará, Memento. Por cierto, ¿fuiste a Eilen Jewell en el Sol? Me volvió a encantar. Un beso

memento dijo...

Pues no, fue una putada, pero tenía mucho curro para el lunes. Donde sí que estuve fue en el de Hiatt. ¿Y tú? [la palabra que me ha salido ahora es "tatiness", que mola]

memento dijo...

Me cago en la mar, me acabo de dar cuenta de que me voy a perder el concierto de mnañana de Imelda...

Helene Hanff dijo...

Me perdí el de Hiatt y me voy a perder hoy el de Imelda...¡muy mal!
Jaja, me encanta "tatiness"